lunes, 8 de marzo de 2010

PARA QUE TODOS LOS DÍAS SEAN 8 DE MARZO

El 8 de marzo es la fecha en la que se conmemora el día internacional de la mujer trabajadora, fruto del esfuerzo y la lucha de muchas mujeres a lo largo de la historia.

El 8 de marzo no corresponde por tanto a hechos aislados, como nos dicen, incendio en la fábrica Cotton de Nueva York, huelga de mujeres… si no la constancia de lucha y reivindicación de derechos desde las primeras mujeres, ya desde la revolución francesa, con conciencia de clase y mirada crítica y despierta a la sociedad que las convertía en sumisas.
El feminismo se ha devaluado en nuestros días hasta el punto que parece que sólo el 8 de marzo puedes considerarte feminista y el resto de los días te llaman loca o radical.

Partiendo de que la concepción de feminismo se ha ido degradando hasta el punto de dejar de lado para una gran parte de la población el verdadero significado del término, empecemos por recuperarlo, que el término feminista se entienda como lo que verdaderamente es, la igualdad, la búsqueda incesante de la igualdad en el seno de la comunidad política entre hombres y mujeres, igualdad en derechos y deberes, igualdad en la vida cotidiana, IGUALDAD NO SÓLO EL 8 DE MARZO.
Porque el 8 de Marzo no debería convertirse, como lo están consiguiendo, en otro hecho aislado, donde cada año nos recuerdan que está todo hecho, que las mujeres ya hemos alcanzado lo que queríamos, ocultando el largo camino que aún nos queda para ser tratadas con el respeto y la igualdad que deseamos cualquier persona.

Que no sólo se acuerden de nosotras, las mujeres, el día 8 de marzo, la situación de la mujer debe ser proceso de lucha, de cambio constante, cada vez que oímos en las noticias una nueva muerte por violencia machista, cada vez que una mujer es acosada sexualmente, cada vez que una mujer es apartada en su puesto laboral y menospreciada, cada vez que relegamos a la mujer en la cocina y al hombre en el sofá, cada vez que vemos la televisión y vemos como utilizan nuestros cuerpos para confundir y enfermar a las niñas. Mujeres, miren a su alrededor, ¿no ven estos ejemplos en su día a día?¿no ven que no basta con lo que están haciendo?
Debemos tomar conciencia de nuestra situación, aunando a mujeres y hombres en este, nuestro recorrido en la historia por conseguir la IGUALDAD DE GÉNEROS, día a día y paso a paso, no un día al año.

Gracias por su atención, esperamos con toda nuestra mejor intención que nuestras palabras no se queden en un papel, si no en su cabeza.

ASAMBLEA FEMINISTA “ARTEIRA”